Parece que el delegado de AFSCA Perdió LA “BRÚJULA”…

DIÁLOGO CON GUSTAVO MANDARÁ –

La irrupción de una nueva emisora “irregular” (¿O ILEGAL?) en el congestionado dial de frecuencia modulada motivó una consulta con el responsable en la ciudad de la autoridad de aplicación y el control de la famosa “Ley de Medios”. Más allá de recibir a ÁTICO con bastante amabilidad, en concreto, no dijo mucho… 

ESCRIBE DIEGO SALVADORI –

Más allá de haber sido promocionada hasta el hartazgo como un enorme logro del kirchnerismo, la nueva “Ley de Medios” no logra aún resolver los viejos problemas relacionados con el funcionamiento ilegal de muchas emisoras de frecuencia modulada que irrumpen en el aire sin autorización alguna. – En la foto se ve al Intendente interino inaugurando la radio «flojita de papeles, un papelon».-

En los últimos días, el congestionado dial bahiense pasó a soportar una nueva emisora “flojita de papeles”, eso sí, instalada en un lugar muy visible de la ciudad (avenida Alem y Paraguay), y sin que nadie haga nada para resolver una nueva injusticiaflagrante para con todos aquellos que, con mucho esfuerzo, intentamos cumplir con las normas…
Lo llamativo es que esta nueva “radio-trucha” (lo lamento si la expresión le molesta al actual delegado local de AFSCA), a diferencia de otras, no se limita a “pasar música y levantar avisos” sino que pretende un perfil noticioso desde el que se anima a “señalar con el dedo” a mucha gente…
¿Y si se señalaran a ellos mismos? ¿Con qué criterio puede un periodista cuestionar a un político porque no hace lo que corresponde o a un delincuente que comete un atropello,si no empieza por su propia casa a cumplir con la ley? Esa condición, sinceramente, pone demasiado en duda todo lo que de él pueda provenir…
“Hablamos de la necesidad de respetar la ley, siempre y cuando no seamos nosotros los que debamos hacerlo”, parecen evidenciar con esa curiosa postura.
¿Hay diferencia entre quien “usurpa” una casa, un local o un espacio público y quien, sin la menor consideración, se aprovecha del descontrol de un “Estado Ausente” para lucrar con un frecuencia que nadie le otorgó?
Lo que está haciendo LA BRÚJULA es más o menos lo mismo que instalar una calesita o un “carrito” en el Parque de Mayo sin ningún permiso ni pagar ninguno de los gravámenes establecidos para quienes usufructúan un bien común, en el caso de una radio, el bien común es el aire, que a diferencia de lo que suele decirse, no es gratis ni mucho menos para algunos, pero sí lo es para otros que se levantan un día, consiguen vaya a saberse como alguien que los financie e instalan
Con estas inquietudes a cuestas, me fui a ver al delegado local de AFSCA, Gustavo Mandará, a quien conozco desde hace muchos años.
Cómo siempre, me atendió con buena predisposición –cosa que le dije—aunque no me dio ninguna respuesta para mi convincente—cosa que también le dije, y según me pareció, no le gustó mucho.
“Estoy al tanto de la situación de esta radio y puedo decir que todo lo que está al alcance de nuestra delegación, está hecho. Se informó a quien corresponde sobre el caso y escapa a nuestro alcance tomar una determinación, a no ser que se nos instruya al respecto”, explicó el funcionario y lo que sigue es la transcripción literal del diálogo mantenido en la pequeña oficina ubicada en avenida Alem al 300, es decir a menos de 500 metros del lugar donde sucede algo desde allí se debería evitar.
–Se informó de la situación, pero la radio sigue al aire en forma ilegal…
–Bueno, pero a diferencia de otras emisoras irregulares, nosotros tratamos de no hablar de “ilegales”, “truchas”, “piratas” o “clandestinas”, esta al menos no interfiere porque ocupa una frecuencia que estaba en trámite.
–Y que fue rechazada a nombre de Baltasar Levantesi…
–Es posible que así sea, pero no lo puedo confirmar por completo. En efecto, una licencia que estaba siendo tramitada a ese nombre fue rechazada hace muy poco, según consta en la resolución 0800/12 de AFSCA, pero nos dicen que cabe la posibilidad que la misma persona o algún familiar pudieran estar tramitando más licencias. La verdad es que están viniendo muchas licencias rechazadas, en especial de aquellas radios que compraron sus pliegos en 2006.
–Pero esta no tiene ni siquiera un trámite iniciado. No está censada ni como “servicio operativo no autorizado”…
–El censo estuvo vigente hasta junio de 2010. Se instruyó a nuestra delegación para que no reciba más formularios… Ahora Diego ¿te parece que a alguien le puede interesar esta nota? Sólo nosotros y un par más que están en el tema podemos entender de qué cuernos estamos hablando…
–No te creas. A mi me preguntan todo el tiempo qué es lo que pasa con LA BRÚJULA…
–Bueno, intentemos explicarlo hasta donde se pueda explicar. Para tratar de entender la situación no sirve ver una fotografía sino que hay que ver toda la película…
–¿Y cómo sería toda la película?
–Inevitablemente, aunque quizás no te guste, habría que empezar por hablar de la Ley de Medios…
–Yo estuve y estoy a favor de que haya una Ley de Medios ¿pero de que ley me hablan si acá viene cualquiera y les abre una radio a cinco cuadras sin ningún permiso y ustedes no hacen nada?
–Esa es, precisamente, la foto y si la presentás de esa manera, no te asiste un poco de razón sino toda.
–¿Y si vemos la película entera no tendría toda la razón?
–Probablemente la seguirías teniendo, pero habría atenuantes a partir de comprender el contexto en que se produce la situación que se plantea, que, quiero aclarar, para mí no es ni agradable ni deseable. Aquí mucho antes de salir al aire, en la misma silla en la que estás vos, estuvo la gente de LA BRÚJULA y yo les expliqué lo compleja que sería situación lo mejor que pude. Querían obtener una licencia. Cómo eso no es posible porque en Bahía Blanca, por la saturación que hay en el dial, no se están siquiera iniciando trámites, cosa que sí sucede en otros puntos del país, me informaron que ellos se instalarían de todas maneras porque querían tener “su radio” y que, según ellos, todas las FM de la ciudad empezaron de la misma manera. Desde ese día hasta que bastante después que la radio salió al aire no los volví a ver.
–¿Y sabiendo que estaba por salir al aire no hiciste nada para impedirlo?
–Es que no es mi función. Hice lo que correspondía a mi condición de delegado. Sobre todo lo que acontece en nuestra jurisdicción en materia de medios de comunicación, se informa en forma oficial al área correspondiente de AFSCA Central y, en este caso específico, te aseguro que con todo detalle, pero la situación, dicho sea de paso, no es nueva ni difiere de otras que acontecen en otros puntos del país.
–Sin embargo, cuando hay una Cadena Nacional o una campaña obligatoria, sí andan atrás de todos marcando el paso y, en tu caso particular, enojándote con quienes no cumplen con pasar los discursos de la Presidenta, que dicho sea de paso sin cada vez más frecuentes y más largos…
–Bueno, eso sí es mi obligación. No enojarme, pero sí para controlar me dieron precisas instrucciones y cada vez que hay Cadena Nacional me indican a quienes hay que controlar, más allá de que todos tienen obligación de emitirla por igual. De hecho yo mismo me encargué de informarle a la gente de LA BRUJULA de que, en ese sentido, para nuestra delegación, ellos tienen la obligación de cumplir con lo mismo que todos y hasta aquí lo están haciendo como corresponde. Creo que a ellos tampoco les gusta que la presidenta hable tan seguido, pero tienen que pasar la Cadena. A mi sí me gusta que hable la Presidenta, porque siempre dice cosas muy interesantes y valiosas para el futuro de todos. Me acuerdo de otros presidentes que leían sus discursos…
–No nos vayamos del tema. Y así como se les pide que cumplan con las Cadenas Nacionales ¿no se te ocurre ir a pedirles la licencia?
–Es que si me llega una orden en tal sentido, sin dudas que lo haría, como se cumple cada orden que llega para labrar un acta o efectuar una notificación. También les indiqué que por ser órbita de nuestra delegación sí tienen obligación de proporcionar y acatar la resolución referida a la carpeta de acceso público que informa, entre otras cosas, quienes son los dueños de la radio, como hacen todas las radios de Bahía Blanca.
–Me parece que tampoco lo están haciendo…
–Pidieron un plazo para poder cumplir tanto con el mensaje al aire que deberán emitir en forma diaria entre las 7 y las 9 AM como para poner disponible la información en Internet y se les otorgó. No tendría sentido que no cumplieran. Vamos a esperar unos días…
–No creo que te digan quienes son los verdaderos dueños y si lo hicieran, la verdad es que eso no es ningún consuelo para quienes nos esforzamos en tener todo en regla…
–Entiendo la situación. De todas maneras, lo que no me cierra es el hecho que no es esta la única radio en esta situación en la ciudad sino que hay bastante más de 20 en las mismas condiciones y con ninguna se armó tanto revuelo…
–¿De verdad te parece que LA BRÚJULA es lo mismo que una FM que funciona en un garaje de un barrio o alguna de un pastor evangélico?
–Bueno, tengo que ser prudente por mi función. No me puedo aventurar a hacer juicios de valor al respecto por más que pueda tener formada una opinión personal. En términos objetivos es una emisora “irregular” como muchas otras y ojalá que se pueda hacer algo para regularizar la situación. Puedo dar fe que desde AFSCA Central se está trabajando mucho al respecto, pero hay que entender que se están descontando 27 años de vacío legal…
–Si les aparece una radio nueva a cinco cuadras de la delegación y no hacen nada, me parece que mucho no van a descontar…
–Bueno. Cómo te dije, eso no depende de mí. También se podría poner énfasis en el hecho que en LA BRÚJULA se generó trabajo para 20 personas. Eso es algo positivo.
–¿Positivo? Andá a poner una pizzería o un restaurant o el comercio que quieras sin habilitación, si por más que tengas 50 empleados te la dejan abierta más de dos semanas. Hacé la prueba…
–Puede ser. No lo sé. En ese caso, es algo que dependería de la Municipalidad…
–No creo que la Municipalidad haga mucho para incomodar a LA BRÚJULA. ¿No has visto la cantidad de pauta publicitaria municipal que reciben?
–Sí, algo he visto. Pero tampoco tengo ninguna injerencia al respecto.
–A nivel provincial, si no se es un medio con licencia, no se puede recibir publicidad oficial…
–No lo sabía. Quizás la municipalidad pueda hacer lo mismo. No lo sé. No tengo vinculación con eso. El otro día sí me llamó alguien de la intendencia para averiguar por las licencias que se otorgan a los municipios.
–¿Otra radio más?
–No lo sé. No te vuelvas loco. Apenas preguntaron. Todavía no volvieron a llamar.
–Te aviso que no me estás dando ninguna respuesta convincente y que voy a transcribir esta charla tal como la estoy grabando…
–¿Hay necesidad? ¿Te parece que a alguien le puede llegar a interesar?
–La verdad siempre es interesante y en este caso, la verdad es que AFSCA no hace nada para resolver una ilegalidad y eso los deja mal parados para exigirles a otros que sí cumplan ¿Con qué sustento?
–Cómo periodista estás en tu derecho de hacer lo que consideres con esta entrevista. Solo te pido que aclares que no es que la situación se desconoce, sino que todavía excede a la incumbencia de nuestra delegación poder resolver respecto a algo tan delicado. Con todo, en lo personal, soy de la idea de que las cosas se deben cumplir por convicción y no porque atrás ande alguien con el garrote vigilando…
–¿Por qué no vas a decírselo a los de LA BRÚJULA, que después andan señalando con el dedo a todo el mundo?
–Creo que algo parecido les dije cuando estuvieron acá y recién estaban con la idea de abrir una radio…
–La verdad es que mucha “bola” no te dieron…
–Me contento con habérselos dicho. Ya veremos como termina esta historia. Confío en que desde la nueva conducción de AFSCA, a cargo del licenciado Santiago Aragón quien sucede a Gabriel Mariotto, se está haciendo lo necesario para seguir avanzando en la resolución no sólo de este sino de muchas otras situaciones conflictivas, fruto del vacío legal que recién empezó a revertirse en 2009.
–Quisiera creerte, pero con casos como este, la verdad es que cuesta mucho…
–Estás en todo tu derecho. Yo si creo y tengo esperanza en que si va haber alguna solución va a ser de la mano de esta gestión que tomó el toro por las astas en materia de legislación de medios.

Gustavo Mandará, muchas palabras y pocas respuestas sobre una ilegalidad que sucede a pocos metros de la oficina pública que dirige.

Ahora se puede recurrir a la Justicia

Según dijo Mandará, ahora existe la posibilidad de que cualquier persona que se sienta afectada “en sus derechos” por algo relacionado con los medios de comunicación y su funcionamiento, puede presentarse ante la Justicia para exigir que un juez dictamine si tiene razón o no.
“Si hay tanta gente molesta con la aparición de una nueva radio, perfectamente, puede presentar una denuncia donde corresponde. Ahora hay una ley vigente en base a la cual un juez puede expedirse”, explicó.
–¿Antes no se podía?
–No es que no se podía sino que no había ley en base a la cual dictaminar. Ahora los jueces cuentan con una Ley de Medios acorde a los tiempos que corren. Hasta hace unos años, había cuestiones que no estaban, prácticamente, legisladas. Por ejemplo las emisoras de frecuencia modulada. La ley anterior terminaba diciendo que había que prestar atención a “nuevas tecnologías” como las FM, pero no las regulaba en nada.
De hecho, muchas emisoras irregulares consiguieron un mínimo sustento legal con una serie de amparos dictados a mediados de la década de 1990 por jueces que entendían que no había una ley acorde en base a la cual tomar una determinación sobre su funcionamiento o no. Ahora sí la hay. Un juez debería decir sí o no y mucho más en relación a una radio que empezó a funcionar cuando esta nueva ley ya estaba por completo vigente.
–¿Y no es AFSCA quien debería hacer esa denuncia?
–Es algo que excede por completo mis facultades como delegado. Nosotros podemos actuar únicamente cuando se nos delega algún trámite. No tenemos autonomía alguna. De lo que yo hablo es que así como un comerciante que entiende que se están vulnerando sus derechos o tiene algún conflicto civil puede ir a la justicia, si ahora, empresas de comunicación bahienses están molestas porque apareció una nueva radio que los afecta, podrían pedir la intervención de la Justicia. Es lo que cabe en un estado de derecho.