«Ustedes tienen un sensibilidad especial ante la injusticia, pero a menudo se sienten defraudados por los casos de corrupción, por las personas que, en lugar de buscar el bien común persiguen su propio interés. Les invito a que no se desanimen, no pierdan la confianza, no dejen que se apague la esperanza. Sean los primeros en tratar de hacer el bien, en no habituarse al mal, sino vencerlo». – FRANCISCO